¿Alguna vez has sentido que has dejado escapar la mayor de tus oportunidades? ¿que ha pasado delante de tus ojos y no te has dado cuenta hasta que ya era demasiado tarde? yo sí, de hecho no he sido capaz de averiguarlo hasta ahora. Alomejor es porque era demasiado facil o porque en ese momento no le he dado el valor suficiente. Una vez que ha pasado mi oportunidad, que ha pasado él ante mis ojos; lo he comprendido. Pero, ¿y si ahora resulta que es demasiado tarde? ¿y si he perdido la unica oportunidad de ser feliz a su lado, por un simple capricho? Ahora nosé qué hacer, aunque solamente tengo dos opciones: quedarme parada mirando como se va mientras que miles de gotas de agua salada recorren mi cara; o quitarme los tacones, dejar todo tirado e ir corriendo tras él, sin maletas, sin equipaje, solamente acompañada de la esperanza de que no sea demasiado tarde para ser feliz junto a él, con las mismas gotas de agua salada recorriendo mi rostro, solo que esta vez, son de felicidad. Sé que la decisión está en mis manos, y que él se marcha, cada vez se aleja más, pero.¿acaso pierdo algo más de lo que no tengo ya? lo dudo, porque ahora sé que sin él, las sonrisas no tienen sentido.